Dichos cursos sirvieron como antecesores para la fundación de la Universidad Católica Argentina.
Estos cursos creados para universitarios, representantes del pensamiento nacional, católico y antiliberal del clero del país, de cuya plantilla de profesores formaron parte Atilio Dell'Oro Maini, Luis María Etcheverry Boneo, Octavio Nicolás Derisi, Guillermo Bolatti, Tomás Juan Carlos Solari, Zacarías de Vizcarra, Gustavo Juan Franceschi, Pablo Antonio Ramella, Manuel Moyano, entre otros.
[4][5] La primera comisión directiva la integraron, junto a Tomás Darío Casares, su creador, director y uno de los principales difusores del tomismo en Argentina,[6] César Pico, Octavio Sergio Pico, Faustino Legón, Eduardo Saubidet, Juan Bordieu y Uriel O´Farell.
[7] Pasaron por los Cursos de Cultura Católica personalidades destacadas como Jorge Néstor Salimei, Juan Carlos Onganía, Juan Carlos Goyeneche, Nimio de Anquín, Francisco Luis Bernárdez, Marcelo Sánchez Sorondo, Leopoldo Marechal.
La abolición del monopolio estatal sobre la educación universitaria era una aspiración histórica principalmente de la Iglesia católica, institución que había fundado las primeras universidades del país, luego expropiadas.
[9] Pero durante el gobierno del presidente Arturo Frondizi, en 1958, hubo un movimiento laicista creado a partir de la sanción de dos grandes leyes durante su gobierno: la aprobación del Estatuto del Docente y la que habilitó a las universidades privadas a emitir títulos profesionales.
[10] Fue sin dudas esta última la que motivó una gran protesta estudiantil conocida como "Laica o libre".
Finalmente, el sector de radicales frondicistas, demócratacristianos, nacionalistas católicos y aliados liderado por el presidente Frondizi logró consagrar la aprobación de esta reforma, que permitió otorgar personería jurídica a nuevas universidades.
El 14 de marzo de dicho año se reunió por primera vez el Consejo Superior, presidido por el rector e integrado por los consejeros Ángel J. Battistessa, Guillermo Blanco, Mariano Castex, Atilio Dell'Oro Maini, Agustín de Durañona y Vedia, Luis María Etcheverry Boneo, Alberto Ginastera, Faustino Legón, Emiliano J.Mac.Donagh, Francisco Valsecchi, Amancio Williams y Ricardo Zorraquín Becú.
Finalmente, el 2 de noviembre el ministro Mac Kay firmó el Decreto N.º 14.397 por el cual se reconoció oficialmente a la Universidad Católica Argentina.
[14] Para participar en las actividades puntuables los Centros de Estudiantes de las distintas unidades académicas (Facultades e Institutos) presentan sus equipos representativos que pueden estar integrados por alumnos, docentes, administrativos y/o directivos.
Realiza distintas actividades destinadas no solo a la comunidad universitaria de la UCA sino también para el público en general.