Los campesinos asturianos, iniciante y promotores de la constitución del sindicato fueron: Teodomiro Balsera Rodríguez (la Borra, Salas), Manuel Pérez Rodríguez (Carcedo, Luarca), Carmen Vinjoy Arias (Robledo, Castropol), Robustiano Fernández Álvarez (Troncedo, Tineo) y Jeromo Nuño López (Hevia, Siero).
Mediante el Acta de Constitución se facultó a Jerónimo Nuño López como representante del nuevo sindicato cara a la realización de los trámites necesarios (con el objetivo de depositar los Estatutos Sociales) y otras gestiones requeridas por la administración provincial o nacional.
Políticamente suele situarse próximo al PSOE, siendo su fundador, Honorio Díaz, militante socialista y diputado nacional en los años 1980; y siendo algunos de sus dirigentes militantes socialistas.
Esta etapa se caracterizó por reivindicaciones de tipo horizontal, lucha por mejoras estructurales para el campo y sociales para los campesinos.
En ella participaban algunos dirigentes agrarios que habían tenido un papel destacado en la lucha contra la dictadura.
El cambio de estructura organizativa y sindical, creó importantes tensiones en las bases.
Posteriormente, Cofiño se dedicó a la política ostentando cargos en el PSOE.
Sustituyendo a Cofiño, asumió la Secretaría General en funciones Antón, que era el vicesecretario.
Era un dirigente joven y con poca experiencia sindical, pues procedía del cooperativismo agrario.
Este conflicto se extendería a la recién creada Consejería de Medio Ambiente, que se vio por UCA como un ataque directo a las producciones agrarias y una apuesta clara por un medio rural más de servicios que productivo.
Todos estos resultados permitieron al sindicato validar la representación y el peso específico que se le suponía en el contexto del medio rural asturiano.
Como secretarios ejecutivos forman también parte de la comisión ejecutiva Remedios Menéndez, Arturo Gancedo, Ana Rosa Rozada, Amalio Fernández, Edita González, Ana María Álvarez, Rosa María Nicieza, José Calvo y Joaquín López López.