Una muchacha llamada Milagros es una telenovela venezolana realizada por la cadena Venevisión en el año 1973, original de la escritora cubana Delia Fiallo, fue producida por José Enrique Crousillat.
El destino hace que uno de sus pacientes sea precisamente esa muchacha a la que él violó; sin embargo, la joven, de nombre Milagros, no recuerda su rostro.
Posteriormente, Viviana, la esposa del doctor Saldívar, se va de viaje, pero su barco naufraga y ella muere.
Venevisión quiso repetir la pareja protagónica de su telenovela anterior, Peregrina, (González-Bardina) superando el éxito con esta nueva producción.
En ese entonces, las telenovelas venezolanas se difundían con éxito en diversos países del mundo.