Sin embargo Jean está enamorado y la persigue, encontrándola en la Costa Azul.
Ahora que son "iguales" ella le enseña trucos para hacer dinero, y el pronto consigue que la viuda le compre un reloj de 30.000 euros.
Jean vende su reloj para comprarle una estadía en el hotel por una semana y un hermoso traje de noche.
Aunque su patrocinadora lo dejará por esto, Jean finge ser un príncipe millonario y lleva a la mujer del patrocinador de Iréne a la habitación que comparte con la viuda millonaria, e Iréne lleva a su viejo millonario hasta su habitación, que queda al frente de la de Jean, ella al principio, trata de dirigir su atención hacia la ventana, cuando se da cuenta de que Jean está con otra mujer.
La película finaliza con Jean e Iréne huyendo juntos en la moto hacia Italia.