Es un arbusto grande o árbol que llega a medir hasta 8 metros de altura.
Actualmente, es considerada como maleza nociva en Australia y Nueva Zelanda.
La cera japonesa se vende en cuadrados planos o discos y tiene un olor rancio.
Se extrae mediante la presión y el calor o por la acción de disolventes.
Sus frutos son comestibles, aunque su consumo no es recomendable, debido a la toxicidad general de la planta.