Tras unos comienzos un poco titubeantes, acabó promediando 22,5 puntos y 9,9 rebotes en su última temporada como colegial.
Hubo quien le comparó, por sus características físicas, con Larry Bird.
Se ganó directamente el puesto de titular, y no defraudó, promediando 14,7 puntos y 9,6 rebotes, cifras que le permitieron ser elegido en el mejor quinteto de novatos de ese año.
Permaneció una temporada más en la capital, ratificando sus números, pero a principios de la temporada 94-95 fue traspasado a Golden State Warriors, y antes de que acabara la misma, acabó en Minnesota Timberwolves.
Pasó por Phoenix Suns,[2] donde estuvo 6 temporadas, para acabar su carrera jugando no más de 30 partidos por temporada en Utah,[3] Boston y Atlanta.