Finalmente les gustó y Springsteen se la dio sin cobrarles nada a cambio.
También fue nominada a un Grammy por la mejor canción escrita para una película, serie u otro formato visual.
La canción fue utilizada en los créditos del documental «WWE: Behind the Curtain», realizado por la ESPN en 2015.
Springsteen la grabó en su estudio de grabación Thrill Hill en Nueva Jersey, tocó todos los instrumentos y la produjo él mismo.
También se hizo disponible una versión extendida del videoclip en iTunes que solo mostraba a Springsteen.