La mano que mece la cuna

La mano que mece la cuna (Título original en inglés: The Hand That Rocks the Cradle) es una película de suspenso psicológico estadounidense de 1992 dirigida por Curtis Hanson, escrita por Amanda Silver, producida por David Madden, y protagonizada por Annabella Sciorra, Rebecca De Mornay, Matt McCoy, Ernie Hudson, Julianne Moore y Madeline Zima.

Ella está embarazada por segunda vez y acude a un médico ginecólogo para un examen.

Así conoce inesperadamente a Peyton Flanders, quien parece ser la persona ideal para el puesto.

La siguiente víctima es el marido de Claire, Michael, al que Peyton intenta seducir sutilmente sin lograrlo.

Al día siguiente, Claire habla con Michael y le pide que por favor vayan de viaje unos días fuera de la ciudad, pero sin Peyton, quien los escucha con el comunicador del bebé.

Más tarde, a Marlene le encargan la venta de una casa que, casualmente, resulta ser la del doctor Mott.

Al observar detalles de la casa con una lupa, ve que hay un colgante exactamente igual al que cuelga en la casa de Claire y eso le suscita sospechas.

Investiga en la hemeroteca y descubre que Peyton es en realidad la esposa del difunto doctor.

Al entrar, se acciona la trampa, la cual derriba el techo de cristal sobre ella, y ésta muere.

Cuando Claire sale del hospital se propone saber qué quería decirle Marlene antes de morir.

Al revisar su oficina y visitar la casa en venta del doctor Mott, descubre la verdad.

Peyton escapa usando una varilla para el carbón, y busca a los niños que se escondían en el ático.

Claire llega al ático y sostiene una pelea con Peyton, para después sufrir otro ataque de asma.

En agosto de 1990, se informó que Interscope Communications estaba preparando la película para Hollywood Pictures.

La película duró en el puesto número uno durante cuatro semanas consecutivas, luego terminó con El curandero de la selva, que también fue producida por Hollywood Pictures.

El público encuestado por CinemaScore le dio una calificación promedio de «A−» en una escala de A+ a F. Gene Siskel declaró que tuvo problemas para aceptar la premisa de esta película debido a la manera casual en que la madre contrata a la niñera en una escena temprana, citando que la premisa no es realista.