Este enunciado publicado por Claude Shannon el 1948 se basó sobre trabajos anteriores de Harry Nyquist y Ralph Hartley.
Aun así, estos datos transitan la mayoría del tiempo sobre canales no fiables, sufriendo varias interferencias y por lo tanto se mezclan con el ruido.
Entonces, ¿cómo se pueden eliminar los errores de transmisión?
La solución consiste en introducir cierta redundancia en los mensajes emitidos por la fuente con el fin de que el receptor pueda corregir los errores, de tal forma que el mensaje sea compuesto por
símbolos de redundancia también están sujetos a deformaciones debido al ruido del canal.
La unidad para medir el número de símbolos por segundo es el baudio.