[1] Las leyes bahaís también estipulan que solo las sagradas escrituras de la fe bahaí y las de cualquier otra religión pueden ser leídas o cantadas allí dentro, y en cualquier idioma.
`Abdu'l-Bahá, hijo del Fundador de la fe bahaí, Bahá'u'lláh, estipuló que una característica esencial sería que tuviera una forma circular de nueve lados.
[6] Las escrituras bahaís también establecen que no debe haber imágenes, fotos o estatuas dentro de la Casa de Adoración, y que ningún púlpito o altar sea usado (aunque los lectores pueden pararse tras un púlpito portátil).
[3] Las nueve puertas del Templo de Loto abren hacia un salón central con capacidad para 2,500 personas.
[8] La Casa de Adoración, junto con los nueve estanques y jardines en su alrededor, toman 26 acres (105,000 m²; 10.5 Ha).