Telegrama de Ems

Por otra parte, Bismarck consideraba que una guerra contra Francia podía ser el aglutinante de la Alemania unificada con la que soñaba; en particular, podía contribuir a atraerse al Reino de Baviera, hasta entonces muy profrancés y receloso del poderío prusiano.

En esta situación, se produjo la vacante en el trono español tras el exilio de Isabel II en 1868.

Bismarck presionó para forzar la aceptación, lo cual no hizo sino aumentar los temores de Napoleón III, pues con un Hohenzollern en el trono español y otro en el prusiano, opinaba que con esa situación Francia quedaría cercada.

No obstante, los partidarios antiliberales del imperio bonapartista autoritario, en torno a Gramont y la emperatriz, querían más, y la misma noche hicieron pedir a Benedetti una confirmación escrita por parte del rey de Prusia.

El 13 de julio, Benedetti, siguiendo dichas instrucciones, volvió a encontrarse con Guillermo I en Ems, en una reunión informal, donde le presentó la petición.

Hito conmemorativo del Telegrama de Ems.