Está ubicada entre dos ciudades importantes : San Pedro Sula (Este) y La Ceiba (Oeste), su "ciudad hermana".
Más adelante, en dirección oeste también se encuentra la villa garífuna de Miami.
[4] Sin embargo, para los habitantes de la ciudad el nombre resultaba demasiado amplio, por lo que al poblado, se le abreviaba como Tela.
A finales del siglo XVI, la bahía de Tela era frecuentada por los bucaneros que merodeaban el mar Caribe, buscando la manera de asaltar las goletas españolas que acarreaban fortunas en metales y piedras preciosas, procedentes de Trujillo, Puerto Cortés, La Habana y otros puertos del Atlántico.
En 1825, año en que se hizo la primera división política territorial, Tela formaba parte del Departamento de Yoro.
En 1976, esta compañía devolvió a la municipalidad de Tela las tierras que ocupaba.
El potentado bananero influyó mucho en las decisiones estatales hasta crear una forma de gobierno paralela que duró varias décadas del siglo pasado.
Tras la desaparición de la Tela Railroad Company, la pequeña ciudad cayó en un letargo del que ha comenzado a despertar en tiempos recientes.
La mayor categoría ocupacional la tienen los empleados u obreros privados (50.2 %) y trabajador cuenta propia sin contratación (17.9%) seguido del productor agrícola sin contratación (8.8 %) y empleado u obrero público (7.3 %).
[6] La emigración para Estados Unidos, Canadá, Gran Caymán y España es muy común en Tela.
Asimismo, los teleños emigran hacia las grandes ciudades de Honduras como Tegucigalpa y San Pedro Sula.
Las principales actividades económicas de Tela son el Turismo, la pesca, la agricultura, la ganadería, y el comercio.
[6] El rambután en septiembre y noviembre, la ganadería en la época lluviosa, ello debido a la producción de leche.
En el área urbana hay trabajo en los meses de marzo y mayo.
En lo que respecta al turismo, el empleo crece en Semana Santa y diciembre.
A este sector, las autoridades le han dado "mucho apoyo".
Pero algunos pobladores opinan que el turismo no es la principal fuente de empleo.
[6] Las comunidades garífunas se dedican al cultivo y la explotación de la yuca, con la cual preparan el casabe.
Otra actividad que genera ingresos para los garífunas es el pescado y el aceite de coco.
De la yuca, se extrae el almidón y del coco el aceite, los cuales se venden en las localidades de Tela, El Progreso, La Lima y San Pedro Sula.
Los hombres trabajan en el oficio de la carpintería, construcción que son labores ocasionales.
[8] A 5 km del centro de Tela se encuentra el Jardín Botánico Lancetilla.
Esta área protegida presenta un sistema de ambientes terrestres, costeros y marinos en un estado que no ha sido alterado mucho por la población humana cercana.
"[15][17] Para preservar estos recursos se creó la Asociación del Arrecife de Tela (Amatela), la cual reúne a todos los sectores sociales y económicos del lugar para buscar estrategias que promueven la utilización sostenible de estos recursos, en especial con fines turísticos.
[18][19] A partir del siglo XVII, San Antonio se ve representado con el Niño Jesús en los brazos; ello se debe a un suceso que tuvo mucha difusión y que ocurrió cuando San Antonio estaba de visita en la casa de un amigo.
En un momento dado, éste se asomó por la ventana y vio al santo que contemplaba, arrobado, a un niño hermosísimo y resplandeciente que sostenía en sus brazos.
[18][19] En las representaciones anteriores al siglo XVII aparece San Antonio sin otro distintivo que un libro, símbolo de su sabiduría respecto a las Sagradas Escrituras.
En ocasiones se le representó con un lirio en las manos y también junto a una mula que, según la leyenda, se arrodilló ante el Santísimo Sacramento que mostraba el santo.