Tanto para la ciudad como para las comunidades rurales que la rodean, la silvicultura y la fabricación de muebles son partes importantes de la economía, pero la deforestación está obligando a la zona a buscar alternativas como el turismo para aprovechar sus recursos naturales y sitios culturales.
Los ya sedentarios otomíes la llamaron «Otompan» y fue conocida también como «Tlaximaloyan» que significaba ‘lugar donde se corta la madera’ por los belicosos aztecas quienes nunca pudieron someter el territorio del Imperio purépecha al chocar siempre con la muralla de este bastión y con los ejércitos de «Los Hijos del Sol».
[5] A principios del siglo XIV los tarascos conquistaron la región, refiriéndose a ella como «Taximaroa» en lugar de Tlaximaloyan y al ocurrir la conquista los españoles se refirieron al lugar indistintamente, predominando el término náhuatl.
Se encuentra a 2060 m s. n. m. (metros sobre el nivel del mar), y cuenta con un clima templado.
Gracias a las lluvias de estos meses, se ha logrado desarrollar muy bien la agricultura y la actividad forestal.