La noche de su regreso, Becky, Rebeca y Manuel cenan y luego salen a ver al transformista Femme Letal, un imitador cuya actuación principal se basa en Becky.
Becky regresa al escenario de Madrid mientras Rebeca pasa su primera noche en prisión.
Paula, la trabajadora social, tiene un interés especial en Rebeca; como ella, está desconsolada, lamentando la pérdida de Hugo, su novio.
Madre e hija se confiesan mutuamente su falta de amor, sus celos y sus secretos.
Rebeca hace una comparación entre ella y la hija en la película Autumn Sonata, en la que la madre de la niña, una pianista sobresaliente, le pide que toque el piano y luego la humilla diciéndole cómo mejorar su actuación.
Rebeca sugiere que ella también se ha sentido siempre inferior a Becky y se ha visto obligada a competir con ella, ganando solo una vez al casarse con Manuel.
Pero incluso esta victoria finalmente se le negó, cuando Becky comenzó una aventura con Manuel.
Rebeca le confiesa a su madre el asesinato de Manuel, y Becky decide echarse la culpa para que su hija salga libre.