Cría únicamente en el norte de Italia, sureste de Francia, y las islas de Córcega, Cerdeña y el archipiélago balear.
En invierno migra a zonas del interior del Sáhara y el Sahel.
Es una especie de campo, abierto y seco, con frecuencia en las laderas de los montes, con matorrales donde anidar.
La curruca subalpina es un pájaro insectívoro.
Construye el nido en matorrales bajos como los tojos, donde suele poner de 3–5 huevos.