Still Life (videojuego)

La agente especial del FBI, Victoria McPherson, está investigando una serie de brutales asesinatos ocurridos en Chicago en el año 2004.

En ambos casos, el asesino tiene como objetivo a trabajadoras sexuales: prostitutas callejeras en Praga y empleadas de un exclusivo salón de masajes y club S&M llamado Red Lantern en Chicago.

El o los asesinos se disfrazan con una capa oscura, un sombrero de copa y una máscara plateada.

Victoria se encuentra con él varias veces, pero nunca ve detrás de su máscara.

La historia estaba destinada a continuar en un tercer juego, pero parecía poco probable que el final se hiciera realidad, ya que la rama de desarrollo de Microïds en Canadá fue comprada por Ubisoft.

Según Microïds, Still Life y su predecesor, Post Mortem, fueron éxitos comerciales.

Sin embargo, como ejercicio de género, ejerce poca energía para atraer a nuevos jugadores".

En 2011, Adventure Gamers nombró a Still Life como el vigésimo mejor juego de aventuras jamás lanzado.