[2] Pocas personas tienen sus propios coches y los autobuses, o camellos, son lentos y van repletos; muchos cubanos pasan horas cada día en la organización de viajes para ir al trabajo, escuela o llevar a cabo una tarea.
Pero con menos conocidos, el intercambio es más normal con cosas como el champú, un trozo de pollo, frutas, o efectivo.
Los empleados de una empresa estatal en Pinar del Río tenían un trato especial en un hospital local a cambio de papel, lápices y otros materiales escasos y servicios.
La teoría del "sociolismo" deduce que cualquier otra persona con control sobre recursos podría intercambiar el acceso a esos recursos para algunos, actuales o futuros, beneficios personales de orden material (es decir sigue el esquema: propiedad, mercado y ganancias).
Aunque el término se hizo prominente durante la recesión económica conocida como Periodo especial en Cuba,[3] el uso ha seguido en los mediados de la década 2000.