Silvio Soldini

De esta experiencia nació Drimage, su primer cortometraje.El afán por el cine se alimentó gracias a su amistad con un grupo de entusiastas, como Luca Bigazzi, que después sería su director de fotografía y con quien dirigió Paesaggio con figure (1983) y Giulia in ottobre (1985).Junto con Giorgio Garini y Daniele Maggioni fundó la productora Monogatari, con la que realizó en 1990 su primer largometraje, L'aria serena dell'Ovest, que participó en el concurso del festival de Locarno, una de las películas más representativas del llamado Nuovo Cinema Italiano.[2]​ Autor culto y refinado, no es un simple heredero de la Commedia all'italiana de la década de 1960, pues como muchos directores de la generación anterior ( De Sica, Monicelli, Comencini, Loy ), Soldini ha demostrado que está a gusto con películas más desafiantes, como Brucio nel vento, Un'anima divisa in due y Le acrobate, o con comedias sentimentales y atrevidas, tales como Pan y tulipanes, Agata e la tempesta, Il comandante e la cicogna.Por otro lado, su formación académica lo acerca a un cine sensible y delicado, preocupado por su unidad temática y formal, así como por el simple rigor de la dirección, la concepción del cine como lectura de la vida, la ligereza del tacto, son sólo algunos de los elementos que contribuyen a definir su estilo, mientras que la tensión y el gusto por introducir cambios son los temas asiduos en sus películas.