Su obra, influenciada por movimientos como el Neorealismo y el Arte povera, es un reflejo de su preocupación social por la condición humana de los marginados en la América Morena.
Realizó en vida 27 exposiciones individuales y 11 colectivas, abarcando su obra la realización de murales, esculturas y pinturas.
Más tarde, debido a su formación y militancia izquierdista fue por muchos años un exilado político del gobierno de Joaquín Balaguer.
Preocupado por el difícil acceso de ciertas manifestaciones del arte popular a los canales oficiales, Lora fue promotor de proyectos como la Bienal Marginal o Bienal Alternativa, espacio creado para facilitar un intercambio cultural con los sectores marginados.
En dicha bienal se exhibían tanto obras de reconocidos artistas como de artistas populares desconocidos.