En los tiempos del coloniaje español se fundó el pueblo "Santo Domingo de Sicaya", ladera abajo.
Llegó a ser un centro de acopio muy importante para los transeúntes que venía desde Lima, la capital, hacia el Cusco o Jauja.
Su ubicación estratégica, ayudó al desarrollo de este pueblo, que brindaba a los arrieros, alimento, forraje agua y medicinas.
El enfrentamiento desigual ocasionó muchas bajas en los valientes peruanos que luchaban por la libertad, la vida y la dignidad del pueblo Wanka.
Producto de la derrota, Samaniego y sus dos lugartenientes deciden replegarse por la noche hacia Chongos Bajo.
Los actuales pobladores de Sicaya conservan orgullosos sus tradiciones, su música y sus costumbres, los adelantos y la tecnología no los han cambiado, pues llevan la vestimenta a la usanza antigua, especialmente cuando es época de festividades.