Shugo

Es decir, los Shugo eran designados por el shōgun para supervisar las antiguas provincias japonesas (kuni).

[1]​ La posición del Shugo fue suplantando al previo Kokushi, que eran designados por la Corte Imperial de Kioto.

A lo largo del tiempo, el poder del Shugo se fue incrementando y para la época en que estalló la Guerra civil de Onin (1467-1477), los conflictos entre Shugo se habían tornado moneda corriente.

Como resultado de las disputas, algunos Shugo incrementaron su poder notablemente, mientras que otros se vieron eclipsados por sus subordinados (como los Shugodai).

A finales del siglo XV, en el inicio del período Sengoku, el poder político de Japón se encontraba fragmentado entre señores feudales de distintos títulos como Shugo, Shugodai, etc. también llamados daimyō.

A pesar de su rol inicial como guerreros, los Shugo tenían un papel importante en la corte.