Originariamente, los sechelt constaban de cuatro subdivisiones que ocupaban diferentes asentamientos.
Socialmente se dividían en tres castas: jefes, nobles o respetables, y las clases bajas.
Los jefes tenían el poder de manera hereditaria y demostraban su generosidad con la ceremonia del Potlatch, común a todas las tribus de la Costa Noroeste.
Los nobles son la clase acomodada, y de ellos surgían los jefes tras celebrar los potlatch.
A la llegada de los europeos probablemente eran unos 26 000, pero la viruela y otras enfermedades redujeron su número.