Se firmaron diversos acuerdos, entre ellos el que Uzbekistán enviaría a Corea del Sur trescientas toneladas de uranio entre 2010 y 2014.
Han también se reunió con Islam Karimov y el entonces presidente del Parlamento Erkin Xalilov.
[8] Esto fue visto como una señal de que tendría éxito en llegar a la presidencia.
[9] Las primeras expectativas que se tenían sobre Mirziyoyev era mejorar las tensas relaciones entre Uzbekistán y Tayikistán.
[11][12] Gran parte de la tensión entre los dos países se debía, según fuentes internacionales, a la propia enemistad personal entre Rahmon y Karimov, por lo que con la muerte de este último, la situación se relajó notoriamente.
El Parlamento confirmó a Aripov como primer ministro ese mismo día.
Durante los primeros meses transcurridos desde la muerte de Karimov, su elección y su juramentación, Mirziyoyev ha implementado diversas reformas liberalizadoras, y ha hecho alusión a realizar más en un futuro, en temas que hasta el momento han retrasado la economía uzbeka e impedido el avance internacional llevando al país al aislamiento, por lo que diversos analistas afirman que Mirziyoyev será mejor presidente que su predecesor.