Ingresó muy pronto en el Conservatorio de París, donde estudió piano con Marguerite Long, Rose Lejour y Lazare Lévy, pero la guerra le obligó a interrumpir estos estudios, que no pudo proseguir tras el fin del conflicto.
De esta época data su amistad con su condiscípulo Désiré Dondeyne, futuro colaborador y quien le descubrió la música para banda.
Además, en 1985 fue elegido para el comité directivo de la «World Association for Symphonic Bands and Ensembles».
Aunque desarrolló alguna actividad como concertista de piano, Lancen se dedicó fundamentalmente a la composición.
De Serge Lancen se destaca un profundo enraizamiento en el estilo francés: claridad, equilibrio y expresividad.