El nombre de esta etnia es típicamente celta, lo que supone por otra parte un problema interesante en territorio ligur.
Se basa en dos raíces célticas, *sego y *brigos que significaría: "(Los de) la fuerte tribu".
La historia viene relatada por Justino,[1] quien cuenta que Y en efecto, los focenses, obligados por la exigüidad y delgadez de su tierra, se dedicaron con más ardor al mar que a la tierra: se ganaban la vida pescando, como comerciantes, a menudo incluso mediante la piratería, que en aquel tiempo y lugar era un honor.
Y es porque, atreviéndose a avanzar en dirección de la orilla última del Océano, llegaron en el golfo galo a la desembocadura del Ródano, y cautivados por el encanto de este lugar, una vez de vuelta entre ellos, atrajeron aún a más gente, diciéndoles lo que habían visto.
Encontraron así al rey de los segobriges, llamado Nanus, en cuyos territorios proyectaban fundar una ciudad.