En el año 1473 Enrique IV convirtió este señorío en condado y siglos más tarde, en 1793, se elevaría a ducado de Santisteban del Puerto.
Entre estas destaca una pátera de plata repujada con representaciones fantásticas del imaginario ibérico, fechada en el siglo II o I a. C. y conocida como Pátera ibera de Perotito.
Este templo es un gran desconocido del románico andaluz oriental (y por extensión del hispano), como lo demuestra hasta ahora, la ausencia de trabajos sobre él en este arte.
Su campanario es una antigua torre albarrana del castillo de San Esteban.
Sobre este asentamiento los bereberes construyeron un recinto de calicanto muy empedrado que coronaba el cerro.
Los vestigios de este período se reducen prácticamente el torreón del lado norte y los refuerzos que fortifican los ángulos sureste, noreste y noroeste.
Son las fiestas patronales en honor a la patrona, la Santísima Virgen del Collado Coronada.
Son popularmente conocidas por sus tradicionales encierros, y porque gira alrededor de la imagen anteriormente citada, también son popularmente conocida por la arraigada tradición de la mayordomía.
Al canto de la salve, la persona que primero toque el varal central o en caso de duda el que más alto lo haya cogido se lo lleva a su casa y para a llamarse mayordomo, junto a 2 compadres, viven un año entero alrededor de la virgen, rezando todos los días el Rosario, y teniendo 24 horas, a disposición del pueblo su casa.
Seguidamente se visita la casa de la Mayordomía y del alcalde.
1985: Antonio Robledo Morales 1994: José Álvarez Molino 2007: Pedro Mercado Soriano 2008: José Manuel Morante Armijo 2020: María Dolores Sánchez Pliego El concepto de deuda viva contempla sólo las deudas con cajas y bancos relativas a créditos financieros, valores de renta fija y préstamos o créditos transferidos a terceros, excluyéndose, por tanto, la deuda comercial.