Bárbara aprovechó su ausencia y añadió una ventana más a las dos que ya tenía la torre para simbolizar la santísima trinidad.
Esa fue su sentencia después de ser apaleada y torturada durante días, pero ella mantenía su posición ante el castigo, el juez decidió que fuese decapitada.
Las puertas del histórico oratorio abrieron para que los creyentes asistan a las festividades.
La multitud saca en procesión la homenajeada imagen entre bailes y cánticos, con atuendos rojos al tiempo que no dejan de estallar fuegos artificiales.
Como parte de los homenajes que se le realizan a Santa Bárbara, el centro cultural Santa Bárbara celebra este memorable día con una misa en la iglesia San Juan Bautista de Cabudare con la respectiva procesión de la imagen que reposa en el restaurante La Carmelita por la avenida Libertador hasta la calle Santa Bárbara; se celebra el acto cultural con bailes, tambores y muchos fuegos artificiales hasta altas horas de la noche.