En 2006, la compañía trasladó sus oficinas centrales desde Denver a Mansfield, estado de Massachusetts.
En una clara estrategia de expansión, la compañía se ha expandido vía adquisiciones en diversos países en los cuales no tenía presencia.
Tradicionalmente, Samsonite ha estado asociada a la durabilidad de sus productos más que al estilo y diseño.
Sin embargo, posee una línea de lujo y diseños exclusivos: Samsonite Black Label.
Calidad, diseño y funcionalidad son los pilares de la marca, teniendo como máximo objetivo cumplir con las expectativas de sus principales usuarios y lograr fidelizar a los nuevos consumidores.