Rudraksha es una planta cuyas semillas se utilizan tradicionalmente como cuentas para orar en el hinduismo y el budismo.
La semilla es producida por varias especies de árboles perennes de grandes hojas del género Elaeocarpus, siendo Elaeocarpus ganitrus la principal especie utilizada para fabricar joyería orgánica y yapa malas.
[1] Cuenta la leyenda que el dios Shiva, mientras bailaba su danza tándava de contemplación y regocijo, viendo los sufrimientos y penurias de los seres humanos comenzó a llorar.
Sus lágrimas, al entrar en contacto con la tierra, se transformaron en las semillas de rudraksha.
[5] Todas estas reglas se basan en varias escrituras védicas como Shiva Purana, Padma Purana y Srimad Devi Bhagavatam o en las experiencias de personas que han estado usando Rudraksha durante muchos años.