La mayoría de su población es rural, los principales asentamientos son Rosamorada con 3,393 habitantes; San Vicente con 4,556; Los Pericos con 2,441; Chilapa con 2,277; Pimientillo con 1,824 y El Tamarindo con 1,544 .A esta división cuatripartita se le ha incorporado un centro circular, o "escudete", que significa la jícara que constituye el mundo sobre el cual habitamos; a dicho círculo central se han añadido unas barras con cuatro líneas, lográndose con tal conjunto la representación del universo, esto es, un quincunce con un centro y los cuatro rumbos o puntos cardinales.Las figuras heráldicas son: en el centro el árbol de rosamorada, del cual tomó su nombre a principios del siglo XIX la población que posteriormente sería la cabecera municipal y le daría nombre a todo el municipio.En el cuartel superior, el venado; en el derecho, una mazorca de maíz; en el inferior, un toro cebú, y en el izquierdo, un camarón; estas figuras remiten, respectivamente, a las principales actividades económicas del municipio: la cacería, la agricultura, la ganadería y la pesca; pero el árbol de rosamorada del escudete remite también a la actividad forestal.De los vestigios prehispánicos localizados en el municipio, se encuentran petroglifos asociados a la tradicional "Aztatlán" en los siguientes puntos: "Los Topiles", "Teponahuaxtla", "Los Relices" y "Paramita".La región mayormente poblada del municipio estuvo dominada por la influencia del clero español durante la Conquista, y sus habitantes fueron indígenas que fundaron un pequeño caserío que posteriormente floreció por sus actividades comerciales de paso.Cuenta como alrededor con muchos ranchos que cada uno tiene diferentes atractivos, por ejemplo en tiempo de aguas en Paramita esta el Cajón y la Barrenada, Providencia Los Muros, en Teponahuaxtla situado en el Municipio de Rosamorada, sin contar los ríos preciosos que están en sus rancherías adentro en la sierra.