Lafontant fue luego enviado como cónsul a Montreal y Nueva York.
[1][2] Tras la caída de Duvalier en 1986, Lafontant partió al exilio en República Dominicana.
En la mañana del 7 de enero, Roger forzó a la presidenta interina Ertha Pascal-Trouillot a renunciar y él se proclamó presidente de Haití.
[5] Lafontant afirmó que contaba con el apoyo del ejército, aunque solo una fracción de la Guardia Presidencial colaboraba activamente con él.
[6] En particular, Hérard Abraham condenó el golpe.