Las hojas suelen tener lóbulos terminados en un número variable de puntas agudas (flexibles, no hirientes).Tiene ramas cada vez más sólidas en ángulo recto a la raíz, formando un estrecho remate de cabeza redonda.En otoño, las hojas tornan de color rojo y permanecen en el árbol hasta bien entrado el invierno.Las flores femeninas, están agrupadas en pares, son pequeñas (2 mm), ovoides, de color rojo y pedunculadas.[5] Quercus: nombre genérico del latín que designaba igualmente al roble y a la encina.