Vivió en Perú hasta 2002, cuando se mudó a EE.
Fue ella quién lo introdujo en el mundo del esquí de fondo.
[1] En enero de 2009, Roberto Carcelén fue el primer peruano en competir en clasificarse para unos juegos olímpicos de invierno.
[3] Roberto también clasificó a las olimpiadas siguientes donde protagonizó una de las grandes hazañas de los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014.
Carcelén llegó a la meta a pesar de tener dos costillas fracturadas y se ganó el reconocimiento mundial por ello; al llegar a la meta, portando la bandera de su país y con evidentes gestos de dolor, el peruano recibió la ovación del público y el apoyo de sus colegas.