Reyes Santos

Los Reyes Santos (en húngaro: Szent királyok) fueron tres monarcas medievales de la dinastía real húngara conocida como la Casa de Árpád, que vivieron en el siglo XI en Hungría y fueron canonizados por su profunda templanza cristiana.

Los monarcas posteriores que pertenecían a otras dinastías y tenían pretensiones sobre Hungría, intentaron a toda costa obtener prestigio y legitimidad trazando lazos familiares con la familia de los reyes santos.

El motivo de los tres reyes santos fue muy recurrente a lo largo de la Edad Media, Renacimiento, Barroco y época moderna, donde san Esteban aparecía representado con un centro (o a veces una lanza o una espada), san Ladislao con un hacha de guerra y san Emerico con un lirio blanco.

Es importante destacar la asociación con la Santísima Trinidad Cristiana, donde el número tres adquiere una significación religiosa fundamental.

Ladislao es recordado como un poderoso guerrero que defiende al mundo cristiano de los invasores paganos y que al mismo tiempo vive sumergido en un mundo espiritual profundo, pasando a ser el ideal de caballero medieval ya desde finales del siglo XIII, siendo la sede de su culto Nagyvárad, en el monasterio que él mismo había fundado y donde fue enterrado tras su muerte.

Los reyes santos: San Ladislao , San Emerico , San Esteban . El culto a los tres monarcas se extendió profundamente durante la Edad Media a tal punto que la dinastía era conocida como "el linaje de los reyes santos". Pintura del altar de la Iglesia de Szepeshely, Hungría. Elaborado en 1478.