En esta edición participaron 33 clubes pertenecientes a 32 federaciones nacionales diferentes.
La final, disputada a partido único, enfrentó al Manchester City inglés con el Górnik Zabrze polaco, en el Praterstadion, en Viena, donde venció el equipo inglés por 2-1.
Este trofeo supone el primer título continental de los "citizens", dirigidos por Joe Mercer, quien contaba con un equipo compuesto en su totalidad por jugadores británicos.
La final, jugada bajo un sustancial aguacero, hizo que la UEFA redujera drásticamente el aforo del estadio Prater por motivos de seguridad, por lo que fue un encuentro que contó con una pobre entrada, a pesar de la numerosa afluencia de hinchas mancunianos a Viena.
[1] El Slovan Bratislava, vigente campeón, fue eliminado por el Dinamo Zagreb en los dieciseisavos de final por 3-0.