[3] Según quedó registrado en el Repartiment (libro datado del siglo XIII donde los escribas del rey Jaime I registraban las donaciones de propiedades para cuando acabara la conquista en Valencia),[4] Jaime I donó el distrito de Rascaña a Guillem d´Aguiló.
La alquería fue comprada por el rey Pedro II para, posteriormente, pasar a la posesión del abad de la Valldigna, que levantó un monasterio.
A partir de Tabernes Blanques se divide en dos lenguas: Alboraya y Almácera.
La vertiente de Alboraya cruza Tabernes Blanques bajo tierra y vuelve a la superficie por el este de Tabernes próximo a Alboraya para volver a dividirse en dos lenguas: Gaiato y Miracle, las que siguen el barranco del Carraixet hasta la playa de Alboraya.
La vertiente de Almácera cruza también el barranco del Carraixet a través de un sifón que abastece a Almácera y Meliana.