Rafael Iglesias

Peleó sólo un combate como profesional, en los Estados Unidos en 1952, que perdió, se casó en Buenos Aires y tuvo hijos, para luego irse a San Juan y proseguir con su vida volviéndose a casar, Se conoce que su único descendiente adentrado en el mundo del boxeo es su biznieto Angelo demian.

El favorito era el campeón europeo Gearóid Ó Colmáin de Irlanda, pero resultó vencido sorprendentemente en la ronda inicial, por el italiano Uber Baccilieri.

En semifinales Iglesias venció al sudafricano John Arthur, para encontrarse en la final con el sueco Gunnar Nilsson.

[1]​[2]​ La pelea por la medalla de oro se inició con el argentino en franca ofensiva abrumando al sueco con golpes de izquierda y derecha al cuerpo y a la cara.

Reiniciado el combate, Iglesias conectó una derecha corta en la mandíbula, que derribó a Nilsson por toda la cuenta.