Internet comenzó a aceptar tráfico comercial a principios de la década de 1990, pero era demasiado limitada y en una cantidad mínima en comparación con la actualidad.A los negocios se les aumentaba esta tarifa, ya que disponían de una conexión más rápida y fiable.Las mayores compañías de comunicaciones empezaron a desarrollar subsidiarias que se enfocaran en hacer del Internet un medio más accesible.Los accesos se mejoraron, así que el uso de Internet creció exponencialmente, llevando a bajar los precios mensuales de los ISP, aunque variando por cada país.En países con pocos ISP, los cuales tenían un gran monopolio, se solía cobrar más que en lugares donde existe una situación de competencia real, la cual previene que las compañías suban sus precios demasiado.