La parte superior de la cola tiene una base marrón, una pequeña mancha verde y otra azul.
Los jóvenes son similares a los adultos, pero todo el pico es negro, las patas grises, el iris más oscuro y la "máscara" facial blanca.
La principal amenaza para la especie la constituye la destrucción de su hábitat, sobre todo a nivel local e incluso en varias zonas consideradas protegidas, como Tambopata-Candamo, Madidi o el Parque nacional del Manu.
Se trata de una especie escasa en cautividad, por lo que suele alcanzar precios elevados.
En años recientes, la especie ha sido situada a menudo en el género Propyrrhura, aunque resulta incorrecto en muchas clasificaciones.