El Artículo 32 de la Constitución del Reino establece la primogenitura con preferencia masculina, lo que significa que el hijo varón mayor del monarca asume automáticamente el trono tras la muerte de este, mientras que la hija mayor puede suceder a la corona únicamente si no tiene hermanos vivos ni hermanos fallecidos.
[1] Tradicionalmente, el heredero al trono también lleva el título nobiliario de Tupoutoʻa; este ha sido el caso desde que se le confirió el título al entonces príncipe heredero Tāufaʻāhau a fines de la década de 1930.
[3] Además del título Tupouto'a, es el VIII ʻUlukālala, que se le fue heredado de su padre en 2006.
[4] Durante el extenso reinado de Jorge Tupou I, el país tuvo seis príncipes herederos.
El único hijo legítimo nacido del matrimonio cristiano con la reina Sālote Lupepau'u, Vuna Takitakimālohi, murió soltero en enero de 1862.