Es por ello que anualmente se procede a la revisión de población mediante los padrones municipales.
Por lo tanto, en la planificación de infraestructuras y servicios resulta muy importante calcular la población flotante que pueda haber en un ámbito geográfico concreto en determinado momento del año.
Un caso emblemático de población flotante es la ocurrida en California, Estados Unidos, entre 1848 y 1855 cuando se desató la Fiebre del Oro, su población flotante de origen europeo, latino y chino aumentó desde 15.000 a 225.000 en pocos años.
Son consideradas población flotante: Además la mayoría de los estudios incluyen a quien trabaja en una localidad pero no reside en ella (se desplaza diariamente).
Al tener sólo en cuenta la población censada, los servicios públicos quedaban muchas veces por debajo de las necesidades reales.