Pietro Antonio Rotari nació en Verona en el seno de una familia noble.
Inicialmente fue pupilo del grabador Robert van Auden Aerd, antes de pasar a la escuela del pintor veronés Antonio Balestra cuyo taller frecuentó en compañía de Giambettino Cignaroli.
Entre 1725 y 1727 se trasladó a Venecia donde entró en contacto con Giovanni Battista Piazzetta y el pintor sueco Johan Richter.
En seguida regresó a Verona en donde abrió su taller, sin embargo, fue llamado a ser retratista de clientes reales y aristocráticos en las ciudades de Viena, Dresde y Mónaco.
Pintó las piezas de altar Cuatro mártires (1745) para la iglesia del Ospedale di San Giacomo en Verona.