Pedro Romana ( c. 1460-1529) fue un pintor renacentista español activo en Córdoba.Nacido probablemente en Córdoba, allí se le documenta a partir de 1488, fecha en la que contrató junto con Luis Fernández la pintura del retablo mayor de la iglesia de San Agustín.[1] Las influencias de la pintura cuatrocentista italiana que se manifiestan en esta tabla, junto con el interés por las amplias arquitecturas clasicistas, pudiera explicarse por la influencia de Alejo Fernández, llegado a Córdoba hacia 1496, cuyo estilo traduce Romana con cierta sequedad.Son esas características las que han permitido atribuirle algunas otras tablas, entre las que destaca la Virgen con el Niño del Museo de Bellas Artes de Córdoba, entronizada y enmarcada por un arco que le sirve para centrar la escena a la vez que evoca connotaciones triunfales.[3] En 1529 había fallecido, pues consta que en ese año su viuda, Catalina Fernández, y su hijo, Pedro Fernández Romana, liquidaron lo que le correspondía de un retablo que, a su muerte, tenía contratado por 39.000 reales con la iglesia de El Carpio, si bien dos quintas partes de la obra se las había cedido a su cuñado y otra quinta parte había dado a Luis Fernández.