Pedro Muñoz (Segovia, finales del siglo XV - c. 1547) fue un platero segoviano perteneciente a una saga de artistas segovianos de este metal, entre los que se encuentran su padre Diego Muñoz I y su hijo Diego Muñoz II, entre otros.
Debió tomar su formación en el taller familiar con Diego Muñoz I, pues se considera su padre.
[1] Su obra fue destinada principalmente a la provincia de Segovia.
Además, en 1542 hizo junto a su hijo Diego las copas de los candeleros viejos de la catedral segoviana.
Se cree que debió fallecer hacia 1547, cuando su hijo empezó a cobrar los trabajos que habían realizado ambos.