Partidos políticos de Argentina

A partir de 1946 la vida política argentina estuvo polarizada entre radicales y justicialistas.

Desde ese año hasta la actualidad, la mayoría de los presidentes han sido radicales o peronistas.

Juan Pablo II reafirma " La autoridad es postulada por el orden moral y deriva de Dios.

La más notable fue la de la Liga Federal organizada por José Artigas en las provincias del litoral.

Los unitarios conformaban un partido político argentino que proclamaban el centralismo y consideraba a las provincias como simples divisiones internas con escasa autonomía.

Para los unitarios lo más lógico era establecer en Buenos Aires un gobierno nacional que tomara todas las decisiones, subordinando a los gobiernos provinciales, también proponía el voto censitario o limitado a una pequeña élite.

[4]​ Por otro lado el Partido Federal era apoyado por pequeños comerciantes, las clases bajas urbanas y la población rural.

Junto con el apoyo de los estancieros y otros grandes propietarios rurales que se fueron identificando con un proyecto político federal.

En relación con el proyecto económico eran proteccionistas y otorgaban un papel central a las industrias nacionales, querían la distribución de los ingresos aduaneros que manejaba Buenos Aires y la libre navegación de los ríos interiores.

Se buscaba la libertad y la autonomía de las provincias delegando solo ciertas funciones a un Estado central.

En 1912 se promulga la Ley Sáenz Peña, que estableció el voto secreto y obligatorio.

A su vez el normal desenvolvimiento de los partidos se vio afectado por constantes golpes de Estado y gobiernos militares que impidieron sistemáticamente gobernar a peronistas y radicales hasta 1983.

En 1983 asume el presidente radical Raúl Alfonsín y en 1989 lo hace el peronista Carlos Menem, proveniente del Partido Justicialista, que lleva adelante un gobierno de corte liberal (se aplicaron algunas medidas).

Esto hace que cierto sector progresista o de centroizquierda comience a tener un lugar en el escenario político nacional.

Durante esa década ambos partidos sufrirán divisiones y fuertes fracturas internas, dando lugar a la formación de alianzas, desgajamientos y a la creación de nuevas fuerzas políticas.

En el espectro de derecha política aparecerá la Unión del Centro Democrático (oficialmente UCEDE, también conocida como UCeDe o UCeDé), un partido que gozó de cierta popularidad a finales del siglo XX y que fue fundado en 1982 por el economista Álvaro Alsogaray y exfuncionario en los gobiernos del presidente constitucional Arturo Frondizi y de los presidentes de hecho Pedro Eugenio Aramburu y Juan Carlos Onganía.

[9]​ Varios miembros principales del partido fueron procesados por hechos de corrupción; entre ellos Alberto Albamonte,[10]​ María Julia Alsogaray, entre otros.

[11]​ Tras la gran crisis económica, social y política que Argentina sufrió a partir de 1999, y que hizo eclosión el 19 y 20 de diciembre de 2001 los partidos políticos cayeron en un desprestigio generalizado, que se manifestó emocionalmente en una consigna coreada constantemente por los manifestantes: «¡Que se vayan todos!».

[13]​[14]​[15]​ En 2005 se creó junto a Compromiso para el Cambio de Macri, la alianza Propuesta Republicana (PRO).

[19]​ A pesar del rotundo éxito de La Libertad Avanza en las elecciones primarias (PASO), el entonces Ministro de Economía, Sergio Massa, experimentó un notable triunfo en las elecciones generales al convertirse en el candidato más votado.

Esta ley implementó el sistema de primarias abiertas, simultáneas y obligatorias.

[23]​ La ley establecía elecciones primarias en las que cada agrupación política presenta sus candidatos, pudiendo tener una o más líneas internas.

Movimiento al Socialismo.