Sufrió incendios varias veces, 1985 y 1992, quedando, como resultado, muy poco bosque natural autóctono.
Esta sierra presenta un típico clima mediterráneo con un fuerte período de sequía en verano y con un máximo en otoño.
En algunos barrancos orientados al norte existen poblaciones de quejigos y roble cerrioides.
Los mamíferos no son la fauna principal, pero el parque tampoco está exento de estos.
Al estar situado tan cerca de la capital provincial, su acceso es muy sencillo.