La presa de Cedillo (Cedilho en portugués) es una presa, pantano o embalse en el tramo internacional del río Tajo entre España y Portugal, construido en 1976 y con capacidad para generar energía hidroeléctrica.
La construcción de esta presa supuso el aislamiento crónico para los pueblos vecinos.
Tanto los del lado español (Cedillo, Herrera de Alcántara, ...) como los del lado portugués (Montalvão, Malpica, ...) han pedido a sus respectivos gobiernos la construcción de un puente que vuelva a unir ambas regiones.
En 2018, los ayuntamientos de Cedillo y Montalvão llevaron a la Cumbre Ibérica la cuestión del puente, aunque su construcción no se ha planteado seriamente por los gobiernos centrales.
La presa también ha tenido un impacto medioambiental en la vida acuática del Tajo.