Palacio de los Duques de Osuna (Aranjuez)
La construcción del palacio se inició en 1750 como un encargo, sobre la base de una casa ya existente, del rey Fernando VI al arquitecto Giacomo Bonavia, para el uso exclusivo del castrato Farinelli.A la muerte de este último, Farinelli cayó en desgracia y fue desterrado por Carlos III en 1760.[4] Permaneció en manos de los duques de Osuna hasta que Mariano Téllez-Girón, XII duque de Osuna, abocado a la ruina, tuvo que venderlo a finales del siglo XIX.[1][4] Fue cuando se dividió en dos el palacio y el alcalde de Aranjuez de entonces, Juan Richer Turión, se hace con la planta baja o principal.[5] Un incendio ocurrido el 2 de mayo de 2018 destruyó la cubierta del inmueble y provocó que el tejado se derrumbase sobre la planta superior.