En el interior se abre un patio central de planta cuadrangular, organizado en torno a ocho columnas toscanas.El escudo heráldico de la fachada fue reconstruido por completo en 2004 tras una intensa investigación dirigida por el padre Patac.
Gracias también a una fotografía datada en 1860 en la que aparece el escudo se pudo crear una copia en arenisca.
La capilla contigua, con categoría de colegiata, se concluyó quince años más tarde que el palacio y está dedicada a San Juan Bautista.
En la obra colaboró, además de Menéndez Camina, el arquitecto gijonés Pedro Muñiz Somonte, que realizó las cubiertas y la torre.
En el exterior destaca la portada meridional que da acceso a uno de los brazos del crucero.