Un píxel muerto es cualquier píxel que no responde como debería en una pantalla LCD, en un CCD o en un sensor CMOS en una cámara digital.
Algunos fabricantes tienen una política de tolerancia cero con las pantallas LCD, rechazando todas las unidades encontradas que tienen un número de subpíxeles o píxeles defectuosos, lo que indica que es un monitor de Clase I.
Los píxeles muertos pueden también ocurrir en racimos; estos son particularmente molestos.
En algunos casos, el fabricante pone todas las pantallas a la venta y reemplaza la pantalla si el cliente reporta la unidad como defectuosa y esta cumple con los requisitos mínimos para hacer una devolución.
Sin embargo los píxeles atascados suelen ser uno o más puntos que no cambian de color o también que siempre aparece más claro o más oscuro que los de su alrededor.